Hasta nuestra empresa de venta y reparación de bombas sumergibles llegan muchos clientes preguntándonos qué tipo de bomba de agua es la más adecuada para sus necesidades. De hecho, la mayor parte de ellos creen que una bomba centrífuga es lo mismo que una bomba sumergible.
Bomba centrífuga y bomba sumergible
La diferencia principal entre éstas dos bombas de agua es
que la sumergible se encuentra totalmente sumergida en el líquido que tiene que
bombear. Por eso, se pueden usar en numerosas aplicaciones de bombeo distintas.
Pero, por otro lado, una bomba centrífuga tiene una mayor capacidad a la
hora de almacenar líquido en su interior. Otra diferencia considerable, es que
una bomba centrífuga tiene que cebarse de vez en cuando, ya que el agua tiene
que ingresar en la bomba sin una gota de aire. En cambio, una bomba sumergible
es autocebada, por lo que se espera que esté funcionando continuamente
una vez se ha introducido en el agua.
Las bombas centrífugas pueden funcionar perfectamente en
pozos de gran profundidad, aunque lo cierto es que se utilizan de manera
habitual en fuentes de agua que no son demasiado profundas. Por el contrario,
una bomba sumergible puede llegar a funcionar de manera muy eficiente,
independientemente de la profundidad que tenga el pozo de agua. Su forma
cilíndrica y alargada es perfecta, puesto que se ajusta a la carcasa del
pozo y su difusor e impulsores consiguen que el mecanismo de bombeo sea mucho
más efectivo.